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Se supone que ya es martes, 05 de marzo del 2013, y que entra a las 9 a clase. Pero básicamente se la suda: cuando uno no puede dormir, no puede, y todo lo demás da igual. Se encuentra tumbada en la cama y escucha a su querido Robe, ¡cómo no!
No deja de dar vueltas en la cama, y su mente y alma igual. Muchas veces el cuerpo y el alma están unidos, querido Platón.
"¿Qué te pasa?". Cuántas veces le habrán hecho esa pregunta y con miles de entonaciones diferentes. Nada, la mejor respuesta. Y en cambio: todo. Aunque quizás es que ni ella sabe qué es lo que le pasa...
Tal vez sea todo lo que le rodea y tiene en su interior: mentiras, anhelos, recuerdos, sentimientos casi muertos y otros recién nacidos, bloqueos... En conclusión: se ha perdido y se encuentra sola. Se ha perdido desde hace mucho, casi un año. ¿O tal vez no? A lo mejor está perdida desde hace más tiempo, y lo ha descubierto ahora...
Bah, ¿qué más da? El tema es que...
"Joder, joder, joder", me repite constantemente. Me grita que no puede más, que no comprende nada. Se pregunta que cuándo va a estar bien de una puta vez. ¿Cuándo? ¿CUÁNDO? No sabe ni cuántas veces se lo ha preguntado. Me siento impotente hasta yo, y eso que simplemente soy la narradora...

¿Es tan difícil alcanzar la felicidad, la tranquilidad, la paz? ¿Por qué muchas veces parece imposible, y en cambio no lo es porque muchos la han logrado? ¡Que me digan el truco! O sea, quiero decir: que me digan el truco para decírselo a ella...

Necesita que todo acabe. Ya. Por favor. Necesita un cambio de 360º. Necesita... Armonía, cariño, tranquilidad, felicidad, seguridad, confianza... Personas nuevas, personas especiales que cambien su vida. Necesita mucho.