Quizás el problema es que no queremos ver la realidad. Personas que desconocen el valor (y por supuesto, la vergüenza) y meten a varios en el mismo saco. Acusan a todos del mismo delito, sin saber si verdaderamente son todos culpables y, por lo tanto, deben ir todos juntos. Algunos conocen este problema como injusticia. Lo que de verdad pienso, es que se dedican a observar y vigilar constantemente a los que no deberían, ya que a otros (que ya no tienen remedio) no les llaman la atención. Por si esto fuese poco, pretenden perfeccionar a los demás, mientras que ni esas personas se dan cuenta de las barbaridades que dicen, ni de sus propios errores. Creo que es algo lógico que para perfeccionar a los demás, uno debe perfeccionarse primero a sí mismo. Realmente me parece patética toda esta situación.
Poseo paciencia, por supuesto. Pero debes de tener un don, porque me la consumes fácilmente.
Y claro, ocurre que pasas, pasas y pasas, pero llega un momento que ya no puedes más, y es ahí cuando tu paciencia muere.
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