Pero pasó el tren. Ese tren que no te deja elegir entre quedarte, o irte. Sino que te lleva directamente en él. Y todas las ilusiones que tenía, desaparecieron como el humo que desprendía ese tren. ¿Por qué tuvo que pasar tan pronto? Hay muchas preguntas, que nunca tienen respuesta...
No hay comentarios:
Publicar un comentario